Fuente: www.truthjihad.com / Kevin Barrett
Los medios de comunicación, dominados por los sionistas -desde la liberalsionista ThinkProgress en el artículo “lo que la gente en Paquistán realmente piensa de la ganadora de Nobel de Paz, Malala Yusafzai” hasta los sionista neoconservadores de la revista Atlántic, en “teorías de la conspiración acerca de Malala” admiten que los paquistaníes no han sido engañados por “Operación Malala”.
Por supuesto, los que hacen propaganda a favor del sionismo, están aprovechando de esta operación tanto como pueden. Ellos quieren que la gente crea que los compatriotas de la propia Malala, que conocen los antecedentes de los hechos y están prestando mucha atención a los acontecimientos de su país, están equivocados acerca de ella, mientras que los propagandistas sionistas que están a medio mundo de distancia de ellos están en lo cierto. Ellos quieren que uno piense que los paquistaníes no conocen su propia sociedad, no conocen su propia historia, no conocen su propia cultura y no se dan cuenta de lo que está pasando en su propio país.
A los sionistas que dominan la corriente principal, también les gustaría hacer que usted se olvide de que el 97% de los paquistaníes ahora saben que el 11s fue un trabajo interno, mientras que sólo el 3% aceptan la historia oficial. Se supone que debemos creer que los propagandistas occidentales saben la verdad sobre lo que está sucediendo dentro y alrededor de Paquistán- tales como el levantamiento del grupo terrorista “Al-Qaeda” patrocinado por la CIA -, mientras que los propios paquistaníes no. Estos paquistaníes deben ser un puñado de teóricos locos de la conspiración.
La simple verdad es esta: cada persona educada en Paquistán (sin contar el puñado que hacen propaganda sionista y los que han sido engañados por ellos) sabe que el llamado “Talibán paquistaní” es una campaña de guerra de cuarta generación diseñada para desestabilizar, descuartizar y finalmente destruir Paquistán.
El «Talibán paquistaní» es un frente formado por los elementos de las agencias de inteligencia de los Estados Unidos, la India y régimen de Israel que quieren hacer a Paquistán lo que hicieron a Libia, Somalia y Sudán, y están tratando de hacer a Siria e Irak.
Esta no es una “teoría de la conspiración”. Es una conspiración confirmada a base de las pruebas. Recordamos, por ejemplo, estudiar el caso del especialista en operaciones negras de la CIA, Raymond Davis, detenido en Paquistán por organizar ataques terroristas de Talibán paquistaní.
El arresto de Davis es un asunto del dominio público en Paquistán. También lo es el hecho de que todavía hoy al menos decenas, si no queremos decir centenares, de sujetos como Raymond Davis, están financiando y organizando operaciones terroristas de la bandera falsa en todo Paquistán, en la mayoría de los casos bajo la marca de “Talibán paquistaní». Raymond Davis es el único que quedó atrapado.
¿Cuál de los colegas de Raymond Davis en la CIA, el Mossad o RAW diseñó el disparó a Malala Yusafzai, en octubre de 2012, con el objetivo de convertirla en otra “Enfermera Nayirah” – una nueva publicidad mediante una mujer joven y atractiva sobre el asesinato en masa cometido por los musulmanes?
Malala puede haber sido acicalada por un tipo llamado Adam B. Ellick. Como Zaki Khalid escribió poco después del disparar a Malala en Veterans Today:
“¿Fue Adam B. Ellick elegido por la CIA como el controlador secreto (de Malala)? sus videos y su CV demuestran cómo sabe quedarse con un gordo trozo del pastel. Fue Adam B. Ellick quien convirtió primero a Malala, también conocida como Gul Makki en B.B.C., en el centro de atención demostrándola con su nombre real en un documental para el New York Times.
Malala era obviamente parte de una operación de inteligencia antes de recibir el disparo, cuando se codeaba con altas figuras militares, diplomáticas y de inteligencia estadounidenses como Richard Holbrooke. En 2009 – tres años antes de los disparos – Malala que tenía por entonces 11 años, ya estaba escribiendo para la BBC.Y sí, estamos hablando de la misma BBC que dio la noticia del colapso del World Trade Center 7, veinte minutos antes de que ocurriera y colaboró en censura y luego en asesinato del testigo clave del 11s, Barry Jennings.
Más recientemente, la BBC trabajó horas extras para hacer que la gente de Escocia desistiera de su duradera lucha para la independencia. Pues como una niña de 11 años de edad, Malala ya era (posiblemente sin saberlo) miembro de MI6.
En pocas palabras: Si uno estudia la historia de Malala, y no puede ver que fue seleccionada y cuidada por una agencia de Inteligencia para ser utilizada en una operación de bandera falsa, sería más tonto que un pomo de la puerta.
Del mismo modo que los paquistaníes saben la verdad sobre Malala y los “talibanes paquistaníes”, los iraníes saben que los ataques con ácido contra 4 mujeres en Isfahán llevan las huellas de las mismas agencias de Inteligencia que han estado detrás de la operación Malala. Incluso los iraníes más ricos, los liberales, los reformistas y los no tan religiosos entienden esto. Como la agencia de propaganda estadounidense RFA / RL informó:
“Un alto asesor del presidente Hasan Rohani, Ali Yunesi, dijo el 27 de octubre a la prensa que el lanzamiento de ácido no tiene cabida en la cultura iraní. Acusó a “elementos contrarrevolucionarios” y “agentes extranjeros” de perpetrar los ataques en Isfahán, donde cuatro mujeres han sido rociadas con ácido por asaltantes en motocicletas”.
Podría tratarse de los mismos asaltantes en motocicletas que asesinaron, hace un par de años, a los científicos nucleares de Irán. Tienen claramente el mismo Modus Operandi y hasta la táctica de evasión-y-escapar que les permite desaparecer tan rápidamente en sus motos es uno de los entrenamientos que se enseñan el régimen de Tel Aviv.
¿Por qué el Mossad israelí, tal vez en colaboración de con sus socios minoritarios, la CIA y el MI6, mutila a las mujeres iraníes?
A nivel más amplio, los ataques de bandera falsa a las mujeres – de Malala a Isfahán- se atribuyen a los “musulmanes extremistas” con el fin de desacreditar y obstaculizar el Despertar Islámico. Su propósito es hacer que Islam sea rechazado. Al igual que ataques de 11.09, ántrax, 07.07, Bali, Madrid, Bombay, Boston, y otras falsas banderas de guerra contra el Islam, la Operación de Malala y los ataques de Isfahán disfrazan la bancarrota moral y social de Occidente y atribuyen falsamente la locura y el nihilismo de este al Islam con el fin de evitar el surgimiento de una alternativa islámica.
A un nivel más detallista, los ataques con ácido del Mossad en Isfahán son parte de un programa de desestabilización y campaña de propaganda contra la República Islámica de Irán. Los sionistas e imperialistas temen a Irán más que a cualquier otro país – tanto por el apoyo eficaz que brinda a HAMAS y Hezbolá, como por su potencial para servir como un modelo regional de un gobierno revolucionario, antisionista y antimperialista.
Los especialistas de guerra de cuarta generación, están tratando de dividir la sociedad iraní resaltando líneas de divergencia. Ellos saben que posiblemente una cuarta parte de la población- representada por la clase media del norte de Teherán- tiene poco interés en la justicia o la religión y es vulnerable a la propaganda occidental que muestra la “buena vida” de la élite occidental hedonista.
Los canales de propaganda estadounidenses constantemente emiten imágenes de unos sonrientes, ricos, sin pañuelos, irreligiosos exiliados iraníes vestidos a la última moda que viven en Los Ángeles bebiendo, bailando y ligando. No hace falta decir que la élite judía-sionista de Hollywood, se complace en ayudar a esta campaña de propaganda de la CIA; la mezcla de esta colaboración llegó a su punto culminante en la película “Argo”.
Los ataques de asaltantes en motocicletas con ácido a las mujeres iraníes, organizados por el Mossad, son parte del mismo intento de dividir a la sociedad iraní a lo largo de la invisible línea que separa los acaudalados del norte de la ciudad capitalina de otros ciudadanos. Al atribuir falsamente los ataques a los defensores de la línea dura de la revolución islámica, los verdaderos delincuentes acarician la esperanza de abrir una brecha en la cultura iraní. Ellos quieren separar los que apoyan el mantenimiento de estrictos códigos de vestimenta islámica de los partidarios de un grado de liberalización. El último objetivo de lanzamiento de ácido es derrocar la República Islámica e instalar otro títere occidental como el Shah.
Pero no va a funcionar. Irán entiende la naturaleza de la operación de la bandera falsa de los ataques de Isfahán, al igual que Paquistán entiende el verdadero significado de la Operación Malala.
ymc
Dr. Kevin Barrett * un doctorado Arabista-islamólogo, es uno de los críticos más conocidos de Estados Unidos de la Guerra contra el Terror. Dr. Barrett ha aparecido muchas veces en Fox, CNN, PBS y otros medios de difusión, y ha inspirado reportajes y artículos de opinión en el New York Times, el Christian Science Monitor, el Chicago Tribune y otras publicaciones líderes. Dr. Barrett ha enseñado en los colegios y universidades en San Francisco, París y Wisconsin, donde se postuló para el Congreso en 2008. Él es el co-fundador de la Alianza entre musulmanes y cristianos y judíos , y autor de los libros La verdad Jihad: Mi lucha épica contra la Mentira 9/11 Grandes (2007) y El cuestionamiento de la Guerra contra el Terror: Una Guía para los votantes de Obama (2009 ).
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